El tiempo ilimitado dejará de estar disponible en la herramienta a partir del 30 de septiembre.
Google Meet vuelve a establecer límites en la duración de las videollamadas.
Google confirmó que a partir del próximo miércoles las videollamadas en Meet tendrán un límite de 60 minutos de duración. Aquellos usuarios que quieran traspasar esa barrera deberán pagar una suscripción, tal como ocurría antes de mayo.
A fines de abril, cuando en el inicio de la pandemia las videoconferencias se convirtieron en un estándar para comunicarse con seres queridos, organizar reuniones de trabajo y asistir a clases virtuales, Google abrió Meet al público general. La herramienta estaba reservada a los clientes de G-Suite, principalmente empresas y organizaciones.
“Meet estará disponible para todos los usuarios en el mundo, para que puedan comunicarse, colaborar y mantenerse en contacto de manera más efectiva durante la pandemia”, comentaba en la ocasión la firma estadounidense. Por entonces señalaron que el período de gracia tendría vencimiento (hasta el 30 de septiembre), coordenada que ahora se confirma.
La decisión también involucra otras funciones de G Suite que Google había liberado, como las opciones de grabación de llamadas en Drive, las reuniones de hasta 250 participantes, las transmisiones en vivo con hasta 100.000 asistentes y los controles de moderación disponibles. Todo volverá a ser pago, en planes que parten de los 25 dólares mensuales.
Las videollamadas ganaron protagonismo en tiempos de pandemia y distanciamiento físico.
En este punto cabe notar que Google Meet seguirá disponible en Android, iOS y para computadoras en forma gratuita, con llamadas de hasta 1 hora.
“No tenemos nada que comunicar con respecto a los cambios en la promoción y las funciones avanzadas que expiran. Si esto cambia, nos aseguraremos de informarlo”, dijeron desde la empresa a The Verge.
Cambios en tiempos de llamadas con video
La anterior decisión de ofrecer Meet en forma gratuita no fue casual: al tiempo que las videollamadas ganaban protagonismo, la competencia recrudeció en ese recortado segmento de la industria del software. Otras compañías lanzaron o mejoraron sus propuestas y emergió la herramienta Zoom, que consiguió gran visibilidad y crecimiento.
Zoom, que no era conocida por la gran audiencia antes de la pandemia, se convirtió en el sinónimo de las videollamadas en tiempos de distanciamiento físico. El crecimiento repentino de la aplicación también trajo dolores de cabeza a sus creadores, que enfrentaron múltiples problemas de seguridad y de privacidad. Naturalmente, los peces gordos del océano aprovecharon las vulnerabilidades de su flamante competidor para mostrar sus propias opciones para los chats con video.
Además de la apertura de Meet, Facebook lanzó la herramienta Rooms y Microsoft mejoró las funciones de Teams. También vimos la irrupción de otras opciones como JioMeet, al tiempo que WhatsApp también sumó opciones para los chats con video. Telegram sumó videollamadas, que antes no estaban disponibles en la app, e incluso Tinder sumó comunicaciones con video entre dos usuarios.